EVANGELIO DEL DOMINGO
"Velen, porque no saben el momento". San Marcos, 51-62.

domingo, 30 de junio de 2019

SIGAMOS A JESÚS


“El Evangelio de Hoy”: Lc 9, 51-62

Lectura del santo evangelio según san Lucas 9,51-62

Cuando se iba cumpliendo el tiempo de ser llevado al cielo, Jesús tomó la decisión de ir a Jerusalén. Y envió mensajeros por delante.
De camino, entraron en una aldea de Samaria para prepararle alojamiento. Pero no lo recibieron, porque se dirigía a Jerusalén.
Al ver esto, Santiago y Juan, discípulos suyos, le preguntaron:
- Señor, ¿quieres que mandemos bajar fuego del cielo que acabe con ellos?
Él se volvió y les regañó. Y se marcharon a otra aldea.

sábado, 29 de junio de 2019

FE PROFESADA, FE TESTIMONIADA


“El Evangelio de Hoy”: Mt 16,13-19

Lectura del santo evangelio según san Mateo:

En aquel tiempo, al llegar a la región de Cesarea de Filipo Jesús preguntó a sus discípulos: "¿Quién dice la gente que es el Hijo del hombre?" Ellos contestaron: "Unos que Juan Bautista, otros que Elías, otros que Jeremías o uno de los profetas." Él les preguntó: "Y ustedes, ¿quién dicen que soy yo?" Simón Pedro tomó la palabra y dijo: "Tú eres el Mesías, el Hijo de Dios vivo." Jesús le respondió: "¡Dichoso tú, Simón, ¡hijo de Jonás!, porque eso no te lo ha revelado nadie de carne y hueso, sino mi Padre que está en el cielo. Ahora te digo yo: Tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia, y el poder del infierno no la derrotará. Te daré las llaves del reino de los cielos; lo que ates en la tierra quedará atado en el cielo, y lo que desates en la tierra quedará desatado en el cielo."  Palabra del Señor.

Reflexión

viernes, 28 de junio de 2019

SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

“El Evangelio de Hoy”:Lc 15, 3-7 Lectura del santo Evangelio según san Lucas En aquel tiempo, dijo Jesús a los fariseos y escribas esta parábola: "Si uno de ustedes tiene cien ovejas y se le pierde una, ¿no deja las noventa y nueve en el campo y va tras la descarriada, hasta que la encuentra? Y, cuando la encuentra, se la carga sobre los hombros, muy contento; y, al llegar a casa, reúne a los amigos y a los vecinos para decirles: "¡Felicitadme!, he encontrado la oveja que se me había perdido." Les digo que así también habrá más alegría en el cielo por un solo pecador que se convierta que por noventa y nueve justos que no necesitan convertirse." Palabra del Señor. Reflexión Celebramos la fiesta litúrgica del Sagrado Corazón de Jesús que se inspira en uno de los símbolos más ricos de la Biblia: el corazón, que en la mentalidad bíblica es la parte más interior de la persona, la sede de las decisiones, sentimientos y proyectos. Cuando hablamos del “corazón” de Jesús estamos hablando de aquello que representa lo más íntimo y personal de Jesús, el centro interior desde el cual brotan su palabra y sus acciones. En este sentido “el corazón de Jesús” es una expresión que indica la misericordia y el amor infinito de Dios tal como se ha manifestado en la persona de Jesús. La lucha interior en Dios acaba con una decisión en la cual prevalece el perdón y la misericordia. El corazón de Dios renuncia al castigo. En lugar de la destrucción merecida por el pueblo, ocurre un vuelco en el corazón de Dios. La incondicional misericordia de Dios se vuelve contra la resolución judicial que establecía el castigo y la muerte. El corazón de Dios, o sea, su libre decisión por el amor se vuelve contra su resolución encolerizada. Aquella determinación divina en favor de Israel se expresa con esta frase: “No me dejaré llevar por mi gran ira, no volveré a destruir a Efraín, porque yo soy Dios, no un ser humano” (Os 11,9). El corazón de Dios es, por tanto, misericordia y vida en favor de su pueblo. Y así se ha manifestado plenamente en su Hijo Jesucristo que “ha venido para que tengamos vida y vida en abundancia” (Jn 10,10). Esto es lo que la parábola quiere ilustrar; su objetivo primario es mostrar hasta dónde llega la misericordia de ese Dios a quien Jesús llama “Padre”, una misericordia que se refleja y se hace concreta en el corazón de Jesús, o sea en el principio que orienta y determina la conducta de Jesús frente a los pecadores, frente a los enfermos, y frente a todas y todos los ylas que son marginados por una u otra causa en la sociedad. Así debemos nosotros reaccionar a favor de los demás siguiendo a Jesús. Buena fiesta del Corazón de Jesús.

miércoles, 26 de junio de 2019

PROFETAS


“El Evangelio de Hoy”: Mt 7,15-20

Lectura del santo evangelio según san Mateo:

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: "Cuidado con los falsos profetas; se acercan con piel de oveja, pero por dentro son lobos rapaces. Por sus frutos los conocerán. A ver, ¿acaso se cosechan uvas de las zarzas o higos de los cardos? Los árboles sanos dan frutos buenos; los árboles dañados dan frutos malos. Un árbol sano no puede dar frutos malos, ni un árbol dañado dar frutos buenos. El árbol que no da fruto bueno se tala y se echa al fuego. Es decir, que por sus frutos los conocerán." Palabra del Señor.

Reflexión

En la época en que San mateo escribe su evangelio, las comunidades necesitan saber quiénes son los verdaderos profetas pues había profetas de todo tipo, debido a la cantidad de movimientos existentes: fariseos, esenios, zelotes, saduceos y se multiplicaban cada día más. Los seguidores de Jesús serán acusados de ser falsos profetas también. Los discípulos serán mansos corderos en medio de lobos rapaces. Por eso Jesús le previene de que deben estar alerta, puesto que la verdad incomoda a los grupos religiosos dominantes.

La comparación del árbol y sus frutos ayuda al discernimiento sobre el papel de la religión y el de sus misioneros en el mundo de ayer y de hoy. Examinemos los resultados que estamos cosechando en nuestras comunidades hoy. ¿Estamos viviendo lo que Jesús nos enseña o no le hacemos caso? Y si sentimos que estamos enfermos como seguidores de Jesús, no olvidemos que él nos cura con ternura y amor, dejémonos sanar por él y sigamos adelante.

martes, 25 de junio de 2019

CAMINAR CON CRISTO


“El Evangelio de Hoy”: Mt 7,6.12-14

Lectura del santo evangelio según san Mateo:

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: "No den lo santo a los perros, ni les echen sus perlas a los cerdos; las pisotearán y luego se volverán para destrozarles. Tratad a los demás como quieren que ellos les traten; en esto consiste la Ley y los profetas. Entren por la puerta estrecha. Ancha es la puerta y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos entran por ellos. ¡Qué estrecha es la puerta y qué angosto el camino que lleva a la vida! Y pocos dan con ellos." Palabra del Señor.

Reflexión

El mensaje del evangelio de hoy quiere animar a la comunidad para que no pierda la fe en medio de las dificultades de la misión. En el camino de la vida, la puerta ancha es siempre más atractiva, pero al mismo tiempo llena de tentaciones y espejismos. La puerta estrecha, a pesar de las dificultades, es más segura para vivir la experiencia de Dios. Se trata de vivir una espiritualidad que nos permita, por un lado, nuestra libertad y por otro nuestra conciencia y nuestra responsabilidad. Lo otro sería caminar o vivir al azar, sin opciones, sin compromisos, sin planes ni objetivos determinados. Gracias a Dios contamos con su Evangelio, su sabiduría y su compañía permanente.

lunes, 24 de junio de 2019

NACIMIENTO DE JUAN BAUTISTA


“El Evangelio de Hoy”: Lc 1, 57-66.80

Lectura del santo evangelio según san Lucas:

A Isabel se le cumplió el tiempo del parto y dio a luz un hijo. Se enteraron sus vecinos y parientes de que el Señor le había hecho una gran misericordia, y la felicitaban. A los ocho días fueron a circuncidar al niño, y lo llamaban Zacarías, como a su padre. La madre intervino diciendo: "¡No! Se va a llamar Juan." Le replicaron: "Ninguno de tus parientes se llama así." Entonces preguntaban por señas al padre cómo quería que se llamase. El pidió una tablilla y escribió: "Juan es su nombre." Todos se quedaron extrañados. Inmediatamente se le soltó la boca y la lengua, y empezó a hablar bendiciendo a Dios. Los vecinos quedaron sobrecogidos, y corrió la noticia por toda la montaña de Judea. Y todos los que lo oían reflexionaban diciendo: "¿Qué va ser este niño?" Porque la mano del Señor estaba con él. El niño iba creciendo, y su carácter se afianzaba; vivió en el desierto hasta que se presentó a Israel. Palabra del Señor.

Reflexión

Celebramos la fiesta de San Juan Bautista. Es él quien se ocupa de mostrar al “mundo” la presencia del Mecía. En el Evangelio de hoy, Lucas nos ofrece las narraciones que tienen que ver con Juan Bautista: El relato de su nacimiento, la circuncisión, la imposición del nombre y la manifestación a toda su parentela e incluso a los vecinos de la comarca.

El nacimiento de Juan es el inicio del cumplimiento de la promesa hecha por Dios, Después Juan vendrá Jesús. La esterilidad es vencida por Dios, él vendrá a salvar a su pueblo. La gente percibe la obra de Dios y eso es fuente de alegría, jubilo y regocijo que envuelve y contagia a vecinos y parientes, como ya lo había predicho el mensajero de Dios. Dios se muestra como compasivo y misericordioso.

Para nosotros los cristianos y cristianas de hoy la importancia de Juan Bautista radica en su vocación profética. Él anuncia la necesidad de la conversión, denuncia las injusticias y la falsa manera de vivir la religión. Vive de manera austera mostrándose abierto a la voz de Dios para luego ir a anunciar a los demás su palabra. Hoy necesitamos forjar nuevos nacimientos de proyectos de vida, de justicia y de paz. Como Juan, sepamos utilizar todos nuestros recursos para ponerlos al servicio de Jesús y de su misión. ¿Cómo estamos mostramos la presencia de Jesús en nuestros ambientes? Demos gracias a Dios por darnos la oportunidad de celebrar el nacimiento de Juan Bautista y de renovar  nuestra vocación profética.

sábado, 22 de junio de 2019

DISFRUTAR, NO AGOBIARNOS

“El Evangelio de Hoy”: Mt 6, 24-34 Lectura del santo evangelio según san Mateo: En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: "Nadie puede estar al servicio de dos amos. Porque despreciará a uno y querrá al otro; o, al contrario, se dedicará al primero y no hará caso del segundo. No pueden servir a Dios y al dinero. Por eso les digo: No estén agobiados por la vida, pensando qué van a comer o beber, ni por el cuerpo, pensando con qué se van a vestir. ¿No vale más la vida que el alimento, y el cuerpo que el vestido? Miren a los pájaros: ni siembran, ni siegan, ni almacenan y, sin embargo, su Padre celestial los alimenta. ¿No valen ustedes más que ellos? ¿Quién de ustedes, a fuerza de agobiarse, podrá añadir una hora al tiempo de su vida? ¿Por qué se agobien por el vestido? Fíjense cómo crecen los lirios del campo: ni trabajan ni hilan. Y yo les digo que ni Salomón, en todo su fasto, estaba vestido como uno de ellos. Pues, si a la hierba, que hoy está en el campo y mañana se quema en el horno, Dios la viste así, ¿no hará mucho más por ustedes, gente de poca fe? No anden agobiados, pensando qué van a comer, o qué van a beber, o con qué os van a vestir. Los gentiles se afanan por esas cosas. Ya sabe su Padre del cielo que tienen necesidad de todo eso. Sobre todo, busquen el reino de Dios y su justicia; lo demás se les dará por añadidura. Por tanto, no se agobien por el mañana, porque el mañana traerá su propio agobio. A cada día le bastan sus disgustos. Palabra del Señor. Reflexión Creo que el secreto está en no dar más importancia de la cuenta a uno de los elementos de nuestra vida. Nosotros los seres humanos somos complejos, necesitamos atender distintas áreas de nuestras vidas. No podemos esclavizarnos Agobiándonos más de la cuenta por satisfacer una necesidad. La radicalidad de Jesús en la expresión “No pueden estar al servicio de Dios y del dinero”, causa espanto hasta hoy, pues toda nuestra lógica sistémica rinde culto al mercado, al dinero, al aumento de las exportaciones, al rigor fiscal, sin que la preocupación primera sea hacer visible el Reino de Dios para los sin-tierra, sin-techo, sin-escuela, sin-salud, sin-agua y sin-identidad. No es fácil elegir entre lo que es bueno para todos y lo que es bueno para el bolsillo y los intereses personales de pocos. Antes que el Reino de Dios están las “añadiduras” del tener, el poder, el imponer y el dominar. La crítica se dirige sobre todo a aquellos que, por preocuparse por los bienes materiales, no experimentan la gratuidad, la fraternidad y el sueño de un mundo con los valores del Reino. Oremos hoy pidiéndole a Jesús que nos conceda poder ser personas normales y equilibradas que pueden servirse de todos los elementos de nuestro mundo, con medida y con conciencia, sabiendo que no estamos solos en este mundo, tenemos hermanas y hermanos.

viernes, 21 de junio de 2019

NUESTRO TESORO


“El Evangelio de Hoy”: Mt 6, 19-23

Lectura del santo evangelio según san Mateo:

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: "No atesoren tesoros en la tierra, donde la polilla y la carcoma los roen, donde los ladrones abren boquetes y los roban. Atesoren tesoros en el cielo, donde no hay polilla ni carcoma que se los coman, ni ladrones que abran boquetes y roben. Porque dónde está tu tesoro, allí está tu corazón.
La lámpara del cuerpo es el ojo. Si tu ojo está sano, tu cuerpo entero tendrá luz; si tu ojo está enfermo, tu cuerpo entero estará a oscuras. Y si la única luz que tienes está oscura, ¡cuánta será la oscuridad!" Palabra del Señor.

REFLEXIÓN

Nadie puede decir que los bienes son dañinos para los seres humanos o que haya que rechazarlos de plano para poder vivir la fe cristiana. Lo que el Sermón de la montaña nos recomienda es no acumular estos bienes como si fueran nuestra salvación. Es una invitación directa a no poner nuestra fe, nuestra esperanza en los bienes materiales, pues son pasajeros. Nuestra fe está puesta en los valores vividos y enseñados por Jesús y orientada hacia el servicio a nuestros hermanos y hermanas. Nuestra fe se vive desde el amor al prójimo, practicando la compasión y la solidaridad hacia los que viven situaciones inhumanas. De lo contrario, nos distanciamos de Jesús el Maestro al que seguimos.

Somos invitados a valorar estas actitudes y estilo  de vida de Jesús como un tesoro, como algo esencial. Esta es la manera de resistir a la tentación de contentarnos con placeres efímeros y satisfacciones pasajeras. ¿Cuál es nuestra valoración y utilización de los bienes? ¿Qué es lo que constituye nuestra mayor fuente de preocupación? ¿Qué tenemos y qué sentimos que nos falta? Pidámosle a Jesús que refuerce nuestra coherencia y nuestra adhesión a su persona y a su proyecto de Reino de Dios. Y no olvidemos que donde esta nuestro tesoro ahí está nuestro corazón. 

jueves, 20 de junio de 2019

SANTÍSIMO CUERPO Y SANGRE DE CRISTO


“El Evangelio de Hoy”: Lc 9, 11b-17

Lectura del santo evangelio según san Lucas:

En aquel tiempo, Jesús se puso a hablar al gentío del reino de Dios y curó a los que lo necesitaban. Caía la tarde, y los Doce se le acercaron a decirle: - Despide a la gente; que vayan a las aldeas y cortijos de alrededor a buscar alojamiento y comida, porque aquí estamos en descampado. Él les contestó: - Denles ustedes de comer. Ellos replicaron: - No tenemos más que cinco panes y dos peces; a no ser que vayamos a comprar de comer para todo este gentío. Porque eran unos cinco mil hombres. Jesús dijo a sus discípulos: - Díganles que se echen en grupos de unos cincuenta. Lo hicieron así, y todos se echaron. Él, tomando los cinco panes y los dos peces, alzó la mirada al cielo, pronunció la bendición sobre ellos, los partió y se los dio a los discípulos para que se los sirvieran a la gente. Comieron todos y se saciaron, y cogieron las sobras: doce cestos. Palabra del Señor.

REFLEXIÓN

Celebramos la fiesta del Cuerpo y la Sangre de Cristo. Dentro del ciclo C leemos este evangelio de la multiplicación de los panes. Jesús mismo es nuestro alimento, de él tomamos la fuerza necesaria para continuar nuestra vida y misión. Nosotros celebramos el cuerpo y la sangre de Cristo en cada Eucaristía, en cada misa. El creyente se reserva una hora para celebrar la eucaristía como núcleo de su vida espiritual. La fiesta del Corpus es una invitación a reavivar la eucaristía. Hace bien detenerse cada semana para encontrarse con otros creyentes, escuchar juntos el evangelio de Jesús, expresar nuestro agradecimiento a Dios por el regalo de la vida, y alimentamos del mismo Jesús.

"Dichosos los llamados a la cena del Señor". Así dice el sacerdote mientras muestra a todo el pueblo el pan eucarístico antes de comenzar su distribución. Son muchos, sin duda, los que se sienten dichosos de poder acercarse a comulgar para encontrarse con Cristo y alimentar en él su vida y su fe. No pocos se levantan automáticamente para realizar una vez más un gesto rutinario y vacío de vida. Somos invitados a vivir la Eucaristía de manera consciente y a darle todo su sentido, extendiéndola a la vida diaria. Así muchas personas que no le encuentran sentido a la misa podrían cambiar su actitud y dejarse alimentar por Jesús. Somos llamados también a descubrir el hambre de nuestros hermanos y a ver cómo podemos ayudarles a saciarse, a retomar fuerzas y a continuar su vida con alegría y confianza. Denles ustedes de comer.

martes, 18 de junio de 2019

AMAR


"El Evangelio de Hoy": Mt 5, 43-48

Lectura del santo evangelio según san Mateo:

En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos: "Han oído que se dijo: Amarás a tu prójimo y aborrecerás a tu enemigo. Yo, en cambio, les digo: Amen a sus enemigos, hagan el bien a los que les aborrecen y recen por los que les persiguen y calumnian. Así serán hijos de su Padre que está en el cielo, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y manda la lluvia a justos e injustos. Porque, si aman a los les aman, ¿qué premio tendrán? ¿No hacen lo mismo también los publicanos? Y si saludan sólo a sus hermano, ¿qué hacen de extraordinario? ¿No hacen lo mismo también los paganos? Por tanto, sean perfectos como su Padre celestial es perfecto". Palabra del Señor.

Reflexión.

El Evangelio de Hoy continúa haciendo hincapié en lo propio de la vida cristiana. Esta es una de las originalidades aportada por Jesús a nuestro mundo. Se nos propone superar la lógica “normal” de la vida y de las relaciones humanas para ser verdaderamente justos como Dios. No es cierto que la justicia sea darle a cada uno lo  que le pertenece, justicia es darle al otro lo mejor, lo que más bien le hace, la justicia es el amor sin límites.

Cuando en nuestro acercamiento a la Biblia nos encontramos con textos como estos, fácilmente nos volvemos escépticos. Amar al enemigo y orar por quien asume este rol frente a nosotros parece una idea desproporcionada. Incluso algunos han pensado que es sólo una exageración. Sin embargo, el amor universal que no supera los lazos de la sangre, del idioma o de la nación sólo es una vaga idea, pero no una manifestación del Reino. El amor a los enemigos es una invitación a experimentar el amor con el que Dios nos ama. Es decir, un amor completamente centrado en el otro y la otra. Creer esto tiene que producir en nosotros una inmensa paz, confianza y esperanza, pues nuestra salvación no depende tanto de lo que nosotros logremos hacer, sino del amor infinito con que Dios nos ama.

Amar al enemigo es, también, ayudarle a encontrar un camino de diálogo y de maduración humana, porque amar al enemigo no es lo mismo que tolerar el abuso y la iniquidad. Una de las maneras más prácticas de amor al enemigo la constituye la oración por los que nos ofenden o están en desacuerdo con nosotros, oración sincera y constante. Otra manera es no hablar mal de aquellos que se han declarado nuestros enemigos y que buscan hacernos fracasar. ¿Y tú, qué opinas?

lunes, 17 de junio de 2019

NO A LAS PROVOCACIONES

“El Evangelio de Hoy”: Mt 5,38-42 Lectura del santo evangelio según san Mateo: En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos: "Saben que está mandado: "Ojo por ojo, diente por diente". Pues yo les digo: No hagan frente al que les agravia. Al contrario, si uno te abofetea en la mejilla derecha, preséntale la otra; al que quiera ponerte pleito para quitarte la túnica, dale también la capa; a quien te requiera para caminar una milla, acompáñalo dos; a quien te pide, dale; y al que te pide prestado, no lo rehuyas".Palabra del Señor. Reflexión Para nosotros los seguidores de Cristo, no se trata de una pasividad estéril que deja todo como está y raya con la injusticia. De lo que se trata es de ir más allá de la mera norma o ley que no trasciende y que puede empeorar los conflictos. Cuando uno de los guardias le pega en una mejilla a Jesús en el proceso que lo condenó a la muerte en la cruz, Jesús no reacciona de manera pasiva sino serena, quiere ayudar al otro a descubrir por sí mismo la injusticia en la que ha caído. Quiere atacar la injusticia buscando el motivo de ésta. Ya sabemos que la violencia y los conflictos no se curan con más de lo mismo. No es verdad que sea eficaz a largo plazo, el ojo por ojo y diente por diente… la solución hay que buscarla más en actitudes interiores que hagan pensar y discernir, no en amenazas provocadoras de miedos y temores pues estos pueden hacer reaccionar a los violentos con más y ciega violencia, provocando peores daños y conflictos. Frente a los conflictos y violencia los cristianos estamos llamados a detenerla antes que alcance niveles caóticos, pero pararla a través de métodos fraternos, haciendo caer en la cuenta de lo absurdo y llamando a la cordura, a lo razonable. No siempre funciona pues los seres humanos somos libres y decidimos mantenernos en caminos violentos. Como le pasó a Jesús que de todas maneras lo mataron, pero ofrece caminos, posibilidades de soluciones dadoras de vida. No olvidemos que las respuestas más prontas Ante agresiones y ofensas nuestras respuestas inmediatas serán como la ley del talión. Pero Jesús nos muestra un camino mejor, el camino fraterno… resistámonos a nuestros instintos y vivamos desde el Evangelio y el seguimiento de Cristo. Esto nos ayudará a disfrutar de una paz más saludable y duradera.

domingo, 16 de junio de 2019

DIOS TRINO Y BUENO

“El Evangelio de Hoy”: Jn 16,12-15 Lectura del santo evangelio según san Juan: En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: "Muchas cosas me quedan por decirles, pero no pueden cargar con ellas por ahora; cuando venga él, el Espíritu de la verdad, les guiará hasta la verdad plena. Pues lo que hable no será suyo: hablará de lo que oye y les comunicará lo que está por venir. Él me glorificará, porque recibirá de mí lo que les irá comunicando. Todo lo que tiene el Padre es mío. Por eso les he dicho que toma de lo mío y se lo anunciará." Palabra del Señor. Reflexión Jesús busca en todo momento lo que quiere el Padre. Su fidelidad a él lo conduce a buscar siempre el bien de sus hijos e hijas. Su pasión por Dios se traduce en compasión por todos los que sufren. Por eso, la existencia entera de Jesús, el Hijo de Dios, consiste en curar la vida y aliviar el sufrimiento, defender a las víctimas y reclamar para ellas justicia, sembrar gestos de bondad, y ofrecer a todos la misericordia y el perdón gratuito de Dios: la salvación que viene del Padre. Jesús actúa siempre impulsado por el “Espíritu” de Dios. Es el amor del Padre el que lo envía a anunciar a los pobres la Buena Noticia de su proyecto salvador. Es el aliento de Dios el que lo mueve a curar la vida. Es su fuerza salvadora la que se manifiesta en toda su trayectoria profética. Este Espíritu no se apagará en el mundo cuando Jesús se ausente. Él mismo lo promete así a sus discípulos. La fuerza del Espíritu los hará testigos de Jesús, Hijo de Dios, y colaboradores del proyecto salvador del Padre. Así vivimos los cristianos prácticamente el misterio de la Trinidad.

jueves, 13 de junio de 2019

SUMO Y ETERNO SACERDOTE

“El Evangelio de Hoy” Lc 22, 14-20 Lectura del Santo Evangelio según San Lucas Cuando llegó la hora, se puso a la mesa con los apóstoles; y les dijo: «Con ansia he deseado comer esta Pascua con ustedes antes de padecer; porque les digo que ya no la comeré más hasta que halle su cumplimiento en el Reino de Dios.» Y recibiendo una copa, dadas las gracias, dijo: «Tomen esto y repártanlo entre ustedes; porque les digo que, a partir de este momento, no beberé del producto de la vid hasta que llegue el Reino de Dios.» Tomó luego pan, y, dadas las gracias, lo partió y se lo dio diciendo: Este es mi cuerpo que es entregado por ustedes; hagan esto en recuerdo mío.» De igual modo, después de cenar, hizo lo mismo con una copa de vino, diciendo: «Esta copa es la Nueva Alianza, sellada con mi sangre, que es derramada por ustedes. Palabra del Señor. Reflexión Celebramos la Fiesta de Jesucristo Sumo y Eterno Sacerdote y el evangelio nos recuerda el ansia de Jesús por celebrar la Pascua con sus discípulos. Sabe lo que esta Pascua significa, pero no la teme, sino la desea, no huye, sino que la prepara cuidadosamente. Quiere compartir la mesa con sus apóstoles, despedirse, es su adiós en el tiempo. No ofrece ofrendas caducas, sino que se ofrece él mismo como alimento eterno y gratuito que vivifica y entusiasma para seguirlo. Nosotros somos invitados continuamente a compartir esta pascua con Jesús. Él nos espera junto al altar del mundo para compartir la mesa con nosotros. Y si al hacerlo, nuestros corazones se encuentran abiertos y deseosos de conocer más y mejor al Señor. El Espíritu Santo trabajará en cada uno de nosotros, y así podremos vivir, cada día más como cristianos auténticos. Pongamos lo que nos toca en esta alianza de vida con Jesús, dejemos que Él sea parte de nuestra existencia. Ven Espíritu Santo, llénanos de amor.

miércoles, 12 de junio de 2019

LA LEY ES EL AMOR MUTUO

“El Evangelio de Hoy”: Mt 5,17-19 Lectura del santo evangelio según san Mateo: En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: "No crean que he venido a abolir la Ley o los profetas: no he venido a abolir, sino a dar plenitud. Les aseguro que antes pasarán el cielo y la tierra que deje de cumplirse hasta la última letra o tilde de la Ley. El que se salte uno solo de los preceptos menos importantes, y se lo enseñe así a los hombres será el menos importante en el reino de los cielos. Pero quien los cumpla y enseñe será grande en el Reino de los cielos. Palabra del Señor. Reflexión Este trocito del Evangelio de San Mateo nos permite pensar en la relación que existe entre el Antiguo y el Nuevo Testamento. La enseñanza de Jesús y la enseñanza heredada hasta ese momento. El pueblo tiene una tradición, una historia y una cultura acumulada que no se puede perder. Jesús no vino a abolir la ley original, aquella que servía de guía y orientación al pueblo de Israel para encontrar el camino de la salvación. Esa ley, marcada por el amor, no sólo hay que cumplirla, sino que hay que predicarla y practicarla en medio de los hermanos. El problema es que la ley original, la del amor, fue pervertida por las autoridades religiosas hasta convertirla en una pesada carga para la gente. Una ley que no liberaba, sino que esclavizaba. Con su manera de vivir, de hablar de Dios y de obrar a favor de la gente Jesús encarna en él mismo el cumplimiento total de la ley y le recuerda a los escribas y fariseos que ellos serán considerados los más pequeños en el Reino de los cielos por corromper la ley y utilizarla para maltratar a su pueblo. Dejémonos llenar por el Espíritu de Jesús y vivamos libremente nuestra fe sirviendo a nuestros hermanos más necesitados y promoviendo la vida en todas sus expresiones.

martes, 11 de junio de 2019

SABOREAR E ILUMINAR

“El Evangelio de Hoy”: Mt 5, 13-16 Lectura del santo evangelio según san Mateo: En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos: "Ustedes son la sal de la tierra. Pero si la sal se vuelve sosa, ¿con qué la salarán? No sirve más que para tirarla fuera y que la pise la gente. Ustedes son la luz del mundo. No se puede ocultar una ciudad puesta en lo alto de un monte. Tampoco se enciende una vela para meterla debajo de un celemín, sino para ponerla en el candelero y que alumbre a todos los de casa. Alumbre así su luz a los hombres, para que vean sus buenas obras y den gloria a su Padre que está en el cielo". Palabra del Señor. Reflexión Somos nosotros la sal y la luz enviados a dar sabor y a iluminar. Esta es una condición muy exigente de parte de Jesús, pero al mismo tiempo es un privilegio. Saborear e iluminar con la fuerza de Jesús es único. Los evangelios nos presentan a Jesús en el ejercicio de dar sabor a la vida de la gente. Les invita y nos invita a vivir intensamente lo que somos y a encontrar la alegría y el gozo en vivir volcados hacia los demás, sirviendo y animando su vida. La vida tiene sabor cuando tiene sentido, cuando se orienta hacia adelante con la fuerza de los valores que dignifican y humanizan. Esa misma práctica ilumina, aclara y potencia la vida de los hombres y mujeres. Los seguidores de Jesús no estamos para probar, buscar y confirmar sabores en nuestros ambientes sino para aportarlos nosotros con una vida acorde con la de Jesús. Cuando damos cabida a prejuicios, cuando nos dedicamos a Juzgar a los otros, cuando nos atribuimos la función de correctores de nuestra gente, nos desviamos de nuestra vocación cristiana. En vez de dar sabor e iluminar la vida de los demás lo que hacemos es quitarle intensidad a su Vida y confundirles. Somos sal y luz cuando revestimos nuestra vida de muchos valores y actitudes que construyan comunidad de hermanos y hermanas. Valores de solidaridad, compasión, cuidado, amor, amistad y fraternidad. Continuemos creciendo en nuestra capacidad de respuesta al Evangelio.

lunes, 10 de junio de 2019

DICHOSOS

“El Evangelio de Hoy”: Mateo 5,1-12

Lectura del santo evangelio según san Mateo:

En aquel tiempo, al ver Jesús el gentío, subió a la montaña, se sentó, y se acercaron sus discípulos; y él se puso a hablar, enseñándoles: "Dichosos los pobres en el espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos. Dichosos los que lloran, porque ellos serán consolados. Dichosos los sufridos, porque ellos heredarán la tierra. Dichosos los que tienen hambre y sed de la justicia, porque ellos quedarán saciados. Dichosos los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia. Dichosos los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios. Dichosos los que trabajan por la paz, porque ellos se llamarán los Hijos de Dios. Dichosos los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos. Dichosos ustedes cuando los insulten y los persigan y los calumnien de cualquier modo por mi causa. Estén alegres y contentos, porque su recompensa será grande en el cielo."  Palabra del Señor.

miércoles, 5 de junio de 2019

UNIDOS A JESÚS

“El Evangelio de Hoy”: Jn 17,11b-19 Lectura del santo evangelio según san Juan: En aquel tiempo, Jesús, levantando los ojos al cielo, oró, diciendo: "Padre santo, guárdalos en tu nombre, a los que me has dado, para que sean uno, como nosotros. Cuando estaba con ellos, yo guardaba en tu nombre a los que me diste, y los custodiaba, y ninguno se perdió, sino el hijo de la perdición, para que se cumpliera la Escritura. Ahora voy a ti, y digo esto en el mundo para que ellos mismos tengan mi alegría cumplida. Yo les he dado tu palabra, y el mundo los ha odiado porque no son del mundo, como tampoco yo soy del mundo. No ruego que los retires del mundo, sino que los guardes del mal. No son del mundo, como tampoco yo soy del mundo. Conságralos en la verdad; tu palabra es verdad. Como tú me enviaste al mundo, así los envíos yo también al mundo. Y por ellos me consagro yo, para que también se consagren ellos en la verdad." Palabra del Señor. ReflexiónContinuamos leyendo la oración de despedida de Jesús. Pide a Dios que les conceda a sus discípulos mantenerse en la unidad para combatir y resistir las propuestas ajenas a su proyecto de amor fraterno que conduce al Reino de Dios. Jesús también fue enviado al mundo para desafiarlo. Sus discípulos deben seguir este camino sabiendo que como el Maestro sufrirán el odio del mundo. Jesús no pide que se les resguarde de esa hostilidad, sino que los proteja en medio de las adversidades, que sean consagrados y enviados al mundo, en orden a su misión, consagrados en la Palabra de Dios que es la Verdad. Reflexión Los discípulos han aceptado y guardado la palabra que Jesús les transmitió de parte de Dios, ahora los elige para la misión de transmitir esa misma palabra a otros para que todos y todas tengan vida. También nosotros, en medio de las dificultades y tropiezo debemos pedir a Jesús que nos fortalezca para poder afrontar la realidad permaneciendo unidos a él y entre nosotros con la fe y la confianza puesta en la promesa de que él está siempre con nosotros. Hagamos el esfuerzo de vivir unidos nosotros también, desde el Espíritu de Jesús.

martes, 4 de junio de 2019

ESPÍRITU DE UNIDAD


“El Evangelio de Hoy”: Jn 17, 1-11a

Lectura del santo evangelio según san Juan:

En aquel tiempo, Jesús, levantando los ojos al cielo, dijo: "Padre, ha llegado la hora, glorifica a tu Hijo, para que tu Hijo te glorifique y, por el poder que tú le has dado sobre toda carne, dé la vida eterna a los que le confiaste. Ésta es la vida eterna: que te conozcan a ti, único Dios verdadero, y a tu enviado, Jesucristo. Yo te he glorificado sobre la tierra, he coronado la obra que me encomendaste. Y ahora, Padre, glorifícame cerca de ti, con la gloria que yo tenía cerca de ti, antes que el mundo existiese.