“El Evangelio de
Hoy”: Mt 12, 46-50
Lectura del santo Evangelio
según san Mateo
En aquel tiempo, estaba Jesús hablando a la gente,
cuando su madre y sus hermanos se presentaron fuera, tratando de hablan con él.
Uno se lo avisó: Oye, tu madre y tus hermanos están fuera y quieren hablar
contigo." Pero él contestó al que le avisaba: ¿Quién es mi madre y quiénes
son mis hermanos?" Y, señalando con la mano a los discípulos, dijo: Éstos
son mi madre y mis hermanos. El que cumple la voluntad de mi Padre del cielo,
ése es mi hermano, y mi hermana, y mi madre." Palabra del Señor.
Reflexión
La manera de pertenecer a
la familia de Jesús está vinculada a la escucha y práctica de su palabra. Jesús
se encarga de enfatizar por todos lados en los evangelios la importancia de
permanecer unidos a él a través de su palabra. Al celebrar la memoria de la
Presentación de la Santísima Virgen, no olvidemos que es ella quien mayor atención
presta a la palabra y se declara la servidora del Señor, dispuesta, a vivir la voluntad
de Dios. Jesús tuvo su familia biológica, personalizada en José y María, que le
enseñó la vida y la fe de su pueblo, pero poco a poco se formó su identidad y
fue discerniendo su propia misión de salvación.
La nueva familia de Jesús
es más amplia y universal. Somos llamados a pertenecer a ella dándole
importancia a la Palabra de Dios. La importancia de la Palabra de Dios es que
nos mantiene unidos a él y a su misión. En medio de la pandemia del Covid19 y
de muchísimas situaciones tensas de nuestra realidad cotidiana, amenazante y distrayente
de lo verdaderamente importante, que es seguir a Jesús, su palabra nos hace
centrar en lo esencial. Como la virgen María, estemos atentos a la Palabra de
Dios y a la realización de proyectos concretos para vivirla.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario