EVANGELIO DEL DOMINGO
"Velen, porque no saben el momento". San Marcos, 51-62.

miércoles, 7 de octubre de 2020

NUESTRA SEÑORA DEL ROSARIO


 

“El Evangelio de Hoy”: Lc 1, 26-38

 

Lectura del santo evangelio según san Lucas:

 

A los seis meses, el ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea llamada Nazaret, a una virgen desposada con un hombre llamado José, de la estirpe de David; la virgen se llamaba María. El ángel, entrando en su presencia, dijo: "Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo." Ella se turbó ante estas palabras y se preguntaba qué saludo era aquél. El ángel le dijo: "No temas, María, porque has encontrado gracia ante Dios. Concebirás en tu vientre y darás a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús. Será grande, se llamará Hijo del Altísimo, el Señor Dios le dará el trono de David, su padre, reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin." Y María dijo al ángel: "¿Cómo será eso, pues no conozco a varón?" El ángel le contestó: "El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y la fuerza del Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso el Santo que va a nacer se llamará Hijo de Dios. Ahí tienes a tu pariente Isabel, que, a pesar de su vejez, ha concebido un hijo, y ya está de seis meses la que llamaban estéril, porque para Dios nada hay imposible." María contestó: "Aquí está la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra." Y la dejó el ángel. Palabra del Señor.

 

Reflexión.

 

En la fiesta de Nuestra Señora del Rosario, ¿Qué podrá Dios estarnos pidiendo hoy a ti y a mí? María, termina afirmando, "Aquí está la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra." Ella ha escuchado la palabra de Dios y se pone a sus órdenes. ¿Cuál es la palabra que Dios te dice a ti hoy?  No es nada fácil el ejercicio de discernir cuál es la voluntad de Dios para cada persona, pero es una experiencia que debemos buscar si queremos vivir nuestra vocación humana y cristiana adecuadamente. Fijémonos que si es voluntad de Dios siempre apuntará hacia la vida, anunciará la mejoría, cumplirá la promesa de Dios de salvar y alegrar. Todo lo que promueve a las personas y la Creación integral de Dios, forma parte de su voluntad.

 

María se convierte en auténtica creyente, que espera que Dios realice sus promesas, se constituye en modelo y paradigma de creyente porque, como Abrahán, confía plenamente en la promesa de Dios y coloca todas sus posibilidades y cualidades al servicio de esta causa. Nosotros estamos invitados hoy por este evangelio, a descubrir el anuncio de Dios hoy. ¿Qué es lo que Dios nos está anunciando hoy como salvación para todo su pueblo? Dios nos llama, nos elige, nos propone, pero espera nuestra respuesta libre y voluntaria. Luchemos contra la desesperación, la indiferencia y el desinterés. Impliquémonos como María en los proyectos de Dios. Demos nosotros también nuestro sí a Dios. Rezando el rosario nos ejercitamos en la piedad y crecemos en espiritualidad cristiana y mariana.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario