Una reflexión del Evangelio en perspectiva teológico-pastoral para animar desde la liturgia, la vida de fe en su compromiso personal y comunitario
viernes, 1 de mayo de 2020
CREEMOS EN JESÚS
“El Evangelio de Hoy”: Mt 13, 54-58
Lectura del santo evangelio según san Mateo:
En aquel tiempo fue Jesús a su ciudad y se puso a enseñar
en la sinagoga. La gente decía admirada: "¿De dónde saca éste esa
sabiduría y esos milagros? ¿No es el hijo del carpintero? ¿No es su madre
María, y sus hermanos, Santiago, José, Simón y Judas? ¿No viven aquí todas sus
hermanas? Entonces, ¿de dónde saca todo eso?". Y aquello les resultaba
escandaloso. Jesús les dijo: "Sólo en su tierra y en su casa desprecian a
un profeta". Y no hizo allí muchos milagros, porque les faltaba fe. Palabra
del Señor.
Reflexión
A nosotros puede pasarnos igual si seguimos las corrientes
prejuiciosas de nuestra sociedad. Sabemos muy bien que Jesús se acercaba a los
que nadie hacía caso por ser pobres o simples laicos. Nosotros, siguiendo los pasos
de nuestro Maestro, debemos hacer lo mismo. La humildad, la sencillez y sobre
todo la audacia y el carisma de Jesús se convierten en un obstáculo ante sus
paisanos y de allí se pasa a la incredulidad. La fe nos tiene que llevar a la
práctica de Jesús. No nos dejemos arrastrar por el orgullo y la vanidad de un
prestigio pre-etiquetado.
Descalificando a Jesús por su origen, oficio y formación,
descalifican también el mensaje del evangelio. Nosotros ahora afrontamos una
realidad semejante. Muchos le achacan la
pandemia y todas sus consecuencias a Dios y se preguntan, por un lado, cual es
la culpa, y por otro, se le cuestiona por permitir semejantes sufrimientos. Tendemos
a creer más en lo que dicen en la televisión o en el Internet sobre Jesús
que lo que nos dicen nuestros hermanos y hermanas de iglesia o nuestros
líderes. Incluso creemos más en lo que dice la publicidad sobre Jesús que en lo
que dice la misma Biblia. Y todo porque pensamos que lo que sale en una
pantalla o en un aviso publicitario es más real que la realidad misma. O, simplemente, por estar a la moda o estar
actualizado, siendo gente de hoy. Afrontemos esa situación creyendo de verdad
en Jesucristo y su mensaje de Buena Noticia.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario