“El Evangelio de Hoy”: Lucas 13,31-35
Lectura del santo evangelio según san Lucas:
En
aquella ocasión, se acercaron unos fariseos a decirle: "Márchate de aquí, porque
Herodes quiere matarte." Él contestó: "Vallan a decirle a ese zorro:
"Hoy y mañana seguiré curando y echando demonios; pasado mañana llego a mi
término." Pero hoy y mañana y pasado tengo que caminar, porque no cabe que
un profeta muera fuera de Jerusalén. ¡Jerusalén, Jerusalén, que matas a los
profetas y apedreas a los que se te envían! ¡Cuántas veces he querido reunir a
tus hijos, como la clueca reúne a sus pollitos bajo las alas! Pero no han querido.
Su casa se le quedará vacía. Les digo que no me volverán a ver hasta el día que
exclamen: "Bendito el que viene en nombre del Señor." Palabra del Señor.
REFLEXIÓN
A Jesús
se lo advirtieron muchísimas veces, si no te cuidas te van a matar. Pero Jesús
en vez de cuidarse, de callarse unos meses, de irse a pueblecitos más alejados
hasta que se calmara un poco el asunto, continuó como si nada, acercándose a
Jerusalén. Por decirlo así, Jesús se acercó al peligro, Él se lo buscó. Al
denunciar los poderes, al liberar los oprimidos por “demonios” y al sanar los
enfermos; está anunciando la presencia del Reino de Dios, despertando la
esperanza de los necesitados. A través de la imagen de la gallina que arropa a
sus polluelos, desvela la realidad de violencia, persecución y muerte que
circunda a Jerusalén. Jesús se muestra profundamente sensible e indignado
frente a los sufrimientos de su pueblo impotente y desprotegido en una sociedad
violenta e insegura, como las nuestras hoy. La realidad de hoy nos exige vivir
una actitud profética al estilo de Jesús, denunciadora de los hechos de
violencia y muerte que acontecen a diario en nuestros campos y ciudades.
Nuestra manera de vivir la fe y la vida integral ha de ser una propuesta, en sí
misma, de amor, paz y justicia. Una actitud profética que revele la bendición
de Dios. Eso es la vida Jesús. No vido a ser servido, no vino a cuidarse, a defenderse ni a salvarse, vino a salvarnos.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario