EVANGELIO DEL DOMINGO
"Velen, porque no saben el momento". San Marcos, 51-62.

domingo, 5 de diciembre de 2021

DEJÉMONOS AYUDAR POR JESÚS


 “El Evangelio de Hoy”: Lc 3, 1-6

 

Lectura del santo evangelio según san Lucas:

 

En el año quince del reinado del emperador Tiberio, siendo Poncio Pilato gobernador de Judea, y Herodes virrey de Galilea, y su hermano Felipe virrey de Iturea y Traconítide, y Lisanio virrey de Abilene, bajo el sumo sacerdocio de Anás y Caifás, vino la palabra de Dios sobre Juan, hijo de Zacarías, en el desierto.  Y recorrió toda la comarca del Jordán, predicando un bautismo de conversión para perdón de los pecados, como está escrito en el libro de los oráculos del profeta Isaías: "Una voz grita en el desierto: Preparad el camino del Señor, allanad sus senderos; elévense los valles, desciendan los montes y colinas; que lo torcido se enderece, lo escabroso se iguale. Y todos verán la salvación de Dios. “Palabra del Señor.


Reflexión

 

Los primeros cristianos vieron en la actuación del Bautista al profeta que preparó decisivamente el camino a Jesús. Por eso, a lo largo de los siglos, el Bautista se ha convertido en una llamada que nos sigue urgiendo a preparar caminos que nos permitan acoger a Jesús entre nosotros. ¿Cómo escuchar y acoger ese grito hoy? Lo primero es tomar conciencia de que necesitamos un contacto mucho más vivo con su persona. Necesitamos sintonizar vitalmente con él, dejarnos atraer por su estilo de vida, contagiarnos de su pasión por Dios y por el ser humano.

 

En medio del “desierto espiritual” de la sociedad moderna, hemos de entender y configurar la comunidad cristiana como un lugar donde se acoge el Evangelio de Jesús. Vivir la experiencia de reunirnos creyentes, menos creyentes, poco creyentes e, incluso, no creyentes, en torno al relato evangélico de Jesús. Darle a él la oportunidad de que penetre con su fuerza humanizadora en nuestros problemas, crisis, miedos y esperanzas. En los evangelios aprendemos un estilo de vivir realizable en todos los tiempos y en todas las culturas: el estilo de vivir de Jesús. La experiencia directa e inmediata con el relato evangélico nos hace nacer a una fe nueva, por el contacto vital con Jesús. Él nos enseña a vivir la fe por atracción. Nos hace vivir la vida cristiana, como contagio. En contacto con el evangelio recuperamos nuestra verdadera identidad de seguidores de Jesús.

 

Recorriendo los evangelios experimentamos que la presencia invisible y silenciosa del Resucitado adquiere rasgos humanos y recobra voz concreta. De pronto todo cambia: podemos vivir acompañados por Alguien que pone sentido, verdad y esperanza en nuestra existencia. El secreto de la “nueva evangelización” consiste en ponernos en contacto directo e inmediato con Jesús. Con él es posible engendrar una fe nueva.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario