EVANGELIO DEL DOMINGO
"Velen, porque no saben el momento". San Marcos, 51-62.

jueves, 25 de junio de 2015

EL QUE ESCUCHA ESTAS PALABRAS MÍAS...

“El Evangelio de Hoy”: Mt 7,21-29

Lectura del santo evangelio según san Mateo:

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: "No todo el que me dice "Señor, Señor" entrará en el reino de los cielos, sino el que cumple la voluntad de mi Padre que está en el cielo. Aquel día muchos dirán: "Señor, Señor, ¿no hemos profetizado en tu nombre, y en tu nombre echado demonios, y no hemos hecho en tu nombre muchos milagros?" Yo entonces les declararé: "Nunca los he conocido. Aléjense de mí, malvados."
El que escucha estas palabras mías y las pone en práctica se parece a aquel hombre prudente que edificó su casa sobre roca. Cayó la lluvia, se salieron los ríos, soplaron los vientos y descargaron contra la casa; pero no se hundió, porque estaba cimentada sobre roca. El que escucha estas palabras mías y no las pone en práctica se parece a aquel hombre necio que edificó su casa sobre arena. Cayó la lluvia, se salieron los ríos, soplaron los vientos y rompieron contra la casa, y se hundió totalmente." Al terminar Jesús este discurso, la gente estaba admirada de su enseñanza, porque les enseñaba con autoridad, y no como los escribas. Palabra del Señor.

Reflexión

San Mateo recoge una parábola en la que subraya que ser cristiano es «escuchar» y «poner en práctica» las palabras que vienen de Jesús. No hay otra manera de construir una Iglesia de seguidores ni un mundo mejor. Si no se da esto, nuestro cristianismo es «insensato». No tiene sentido. Esto es lo primero que hay que cuidar en la comunidad.

La parábola es una grave advertencia y nos obliga a preguntarnos si estamos construyendo la Iglesia de Jesús sobre roca, escuchando y poniendo en práctica sus palabras, o si estamos edificando sobre arenas inseguras que no poseen la solidez ni la garantía del evangelio.


El Evangelio nos invita a  hacer un examen de conciencia en nuestras comunidades y en la Iglesia, a todos los niveles, para cuestionar falsas seguridades y poner nombre concreto a la falta práctica de Evangelio. No basta confesar a Jesús «Señor», «Señor» si no hacemos la voluntad del Padre, si no amamos, sirviendo a los más empobrecidos por las prácticas globales antievangélicas y antihumanas que la sociedad ha adoptado. Es hora de cambiar nuestra manera de practicar la fe, tenemos que apuntar hacia la transformación de todo lo que disminuye o lesiona la vida. Así lo hizo Jesús actuando con autoridad. Nosotros somos sus seguidores, debemos ser sus continuadores en el hoy de nuestra historia. Que Nuestra Señora del Perpetuo Socorro interceda por nosotros y nos inspire el modo de aceptar el amor de Dios e ir a socorrer a nuestros hermanos y hermanas. 

martes, 23 de junio de 2015

TRATEN A LOS DEMAS COMO QUIEREN QUE ELLOS LES TRATEN


“El Evangelio de Hoy”: Mt 7,6.12-14
 
Lectura del santo evangelio según san Mateo:

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: "No den lo santo a los perros, ni les echen sus perlas a los cerdos; las pisotearán y luego se volverán para destrozarles. Tratad a los demás como quieren que ellos les traten; en esto consiste la Ley y los profetas. Entren por la puerta estrecha. Ancha es la puerta y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos entran por ellos. ¡Qué estrecha es la puerta y qué angosto el camino que lleva a la vida! Y pocos dan con ellos." Palabra del Señor.

Reflexión

La palabra “perro” tiene dos significados: uno se refiere al animal semi-salvaje y callejero que no gozaba de aprecio; y otro se usa para señalar a los paganos o gentiles. Los cerdos eran animales impuros y por tanto rechazados. Las cosas santas y las perlas son lo más precioso; por tanto, la advertencia apunta a desarrollar para todo tiempo y lugar metodologías de evangelización que respondan a la realidad, la historia y la cultura de cada pueblo. Una estrategia que, como dice Mateo, requiere la astucia de la serpiente y la sencillez de la paloma, para que la perla santa del evangelio sea bien recibida y asimilada.

El mensaje del evangelio de hoy quiere animar a la comunidad para que no pierda la fe en medio de las dificultades de la misión. En el camino de la vida, la puerta ancha es siempre más atractiva, pero al mismo tiempo llena de tentaciones y espejismos. La puerta estrecha, a pesar de las dificultades, es más segura para vivir la experiencia de Dios. Se trata de vivir una espiritualidad que nos permita, por un lado nuestra libertad y por otro nuestra conciencia y nuestra responsabilidad. Lo otro sería caminar o vivir al azar, sin opciones, sin compromisos, sin planes ni objetivos determinados. Gracias a Dios contamos con su sabiduría y su respaldo permanente.

lunes, 22 de junio de 2015

NO JUZGUEN Y NO SERAN JUZGADOS


 El Evangelio de Hoy,  Mateo 7,1-5
 
Lectura del santo evangelio según san Mateo:

 

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: "No juzguen y no serán juzgados; porque les van a juzgar como juzguen ustedes, y la medida que usen, la usarán con ustedes. ¿Por qué te fijas en la mota que tiene tu hermano en el ojo y no reparas en la viga que llevas en el tuyo? ¿Cómo puedes decirle a tu hermano: "Déjame que te saque la mota del ojo", teniendo una viga en el tuyo? Hipócrita; sácate primero la viga del ojo; entonces verás claro y podrás sacar la mota del ojo de tu hermano." Palabra del Señor.

 

REFLEXION

 

La práctica de nuestra fe no consiste en fijarnos en los demás para recriminarles, corregirles, llamarle a la atención, ni ningún otro comportamiento que lleve consigo algún tipo de juicio frente a los demás. Nosotros estamos en este mundo, con el estilo de vida y de misión de Jesús. El pasó por nuestro mundo haciendo el bien. Solo Dios juzga de corazón y lo hace a favor de quienes le necesitan. Jesús nos muestra el camino de lo que debe ser nuestra manera de relacionarnos con los demás: mirar a los demás como quienes nos necesitan y actual, con ellos, de corazón y con toda sinceridad. Cuando nosotros osamos juzgar las actuaciones de nuestros semejantes, casi siempre terminamos condenando y marginando a aquel a quien evalúo. Dios no es así, Él es misericordioso y bueno, perdonando los pecadores. Así que avancemos en la práctica de la fraternidad y rechacemos todo pensamiento y acciones prejuiciosas.

viernes, 19 de junio de 2015

TESORO Y CORAZON


 “El Evangelio de Hoy”: Mt 6, 19-23
 
Lectura del santo evangelio según san Mateo:


En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: "No atesoren tesoros en la tierra, donde la polilla y la carcoma los roen, donde los ladrones abren boquetes y los roban. Atesoren tesoros en el cielo, donde no hay polilla ni carcoma que se los coman, ni ladrones que abran boquetes y roben. Porque dónde está tu tesoro, allí está tu corazón.
La lámpara del cuerpo es el ojo. Si tu ojo está sano, tu cuerpo entero tendrá luz; si tu ojo está enfermo, tu cuerpo entero estará a oscuras. Y si la única luz que tienes está oscura, ¡cuánta será la oscuridad!" Palabra del Señor.

Reflexión

La espiritualidad cristiana nos invita a revisar continuamente, sin actitudes enfermizas, qué es lo que constituye para nosotros lo más valioso.  Qué es lo que ejerce en nuestra identidad, la fuerza mayor o la mayor influencia a la hora de tomar decisiones y mover fichas en busca de realizarnos. El Evangelio de Hoy es puntiagudo en este sentido. “Porque donde está tu tesoro,  allí está tu corazón”. ¿Qué es lo que conduce nuestro corazón como fuerza vital y radical? ¿A dónde queremos llegar, qué es lo que sentimos que nos haría Feliz? ¿Qué trascendencia tiene lo que motiva, en lo concreto, nuestra vida?

La madurez humana y la adultez nos imponen el paso de los sueños infantiles e ingenuos a proyectos más elaborados y concretos que nos ayuden a orientar los esfuerzos cotidianos hacia la consecución de nuestras metas. Todo esto supone un ejercicio interior de búsqueda que termina en unas opciones precisas con las que intentamos englobar todas nuestras determinaciones en lo adelante. Una de tantas propuestas de realización humana es la que nos ha dejado Jesús: el proyecto del Reino de Dios. El Reino de Dios no es una realidad impuesta o enseñada, no podemos acceder a él por la razón. Nuestro primer desafío es el de descubrir el tesoro que encierra esta propuesta para poder disponernos a centrar nuestra vida en desarrollar las actitudes que lo hacen presente entre nosotros sin que dependa solo de nuestras acciones.

Sin descubrir su fuerza fundamental, su alcance y su trascendencia no podríamos optar por el Reino, pues este se desarrolla en contrasentido con las búsquedas más anheladas por las corrientes sociales, políticas y económicas de nuestro mundo. El discernimiento a realizar para poder optar por el Reino como verdadero tesoro al que nos podemos consagrar enteramente, lleva consigo descartar y desactivar en nuestro interior un sinnúmero de contrapropuestas que se oponen a su instauración. Jesús nos invita a  descubrir una nueva dimensión de la vida, en la que las seguridades más imperiosas de la cultura como son la riqueza, el prestigio y el poder cedan ante el amor, la justicia y la gracia. Avancemos en esta espiritualidad cristiana con la confianza puesta en el Señor y vinculados a nuestras comunidades de hermanos y hermanas.

jueves, 18 de junio de 2015

QUIERO, QUEDA LIMPIO

“El Evangelio de Hoy”: Mc 1, 40-45
Lectura del santo evangelio según San Marcos:
En aquel tiempo se acercó a Jesús un leproso, suplicándole de rodillas: "Si quieres, puedes limpiarme". Sintiendo lástima, extendió la mano y lo tocó diciendo: "Quiero: queda limpio". La lepra se le quitó inmediatamente y quedó limpio. Él lo despidió, encargándoles severamente: "No se lo digas a nadie; pero para que conste, ve a presentarte al sacerdote y ofrece por t...u purificación lo que mandó Moisés. Pero cuando se fue, empezó a divulgar el hecho con grandes ponderaciones, de modo que Jesús ya no podía entrar abiertamente en ningún pueblo; se quedaba fuera, en descampado; y aun así acudían a él de todas partes. Palabra del Señor.
REFLEXIÓN
La Misión de Jesús continúa a buen ritmo. Hoy leemos de nuevo el relato que habíamos reflexionado el viernes pasado versión de San Lucas. La aproximación de Jesús es sincera y respetuosa permitiendo al antiguo leproso volver a la comunión con su familia, su sociedad y su comunidad de fe. Se trata de una restauración integral pues estos enfermos eran excluidos de toda interacción humana y declarados impuros con riesgos contaminantes. Jesús hace suyo el sufrimiento de este infeliz, lo toca arriesgando su propia salud y violando la ley y lo sana devolviéndole la posibilidad de integrarse a la sociedad que lo había expulsado. Para eso lo envía a presentarse al sacerdote para buscar su certificado de salud.
Hacer el bien le trajo problemas a Jesús y ya no podía entrar abiertamente a los pueblos. Acercarse a los otros puede traernos serios problemas, son los riesgos del amor. Pero todos se enteraron de que Dios estaba presente y actuando a favor de los marginados. Esta acción de Jesús tiene consecuencias claras para sus seguidores de todos los tiempos: sentir como nuestros el dolor ajeno. Así nos hacemos prójimo de los demás. Abramos nuestro corazón a los demás, demos la mano a quienes descubrimos en necesidad sin fijarnos de dónde viene ni a dónde va. Sólo así seremos testigos de Jesús. Lo contrario seguirá siendo un escándalo de quienes nos llamamos cristianos negándonos a seguir a Jesucristo. Contamos con Jesús, él está siempre con nosotros y nos sana y salva. Gracias Señor, enséñanos a vivir tu amor.

martes, 16 de junio de 2015

Ser perfectos como Dios


"El Evangelio de Hoy": Mt 5, 43-48
 
Lectura del santo evangelio según san Mateo:
 
En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos: "Han oído que se dijo: Amarás a tu prójimo y aborrecerás a tu enemigo. Yo, en cambio, les digo: Amen a sus enemigos, hagan el bien a los que les aborrecen y recen por los que les persiguen y calumnian. Así serán hijos de su Padre que está en el cielo, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y manda la lluvia a justos e injustos. Porque, si aman a los les aman, ¿qué premio tendrán? ¿No hacen lo mismo también los publicanos? Y si saludan sólo a sus hermano, ¿qué hacen de extraordinario? ¿No hacen lo mismo también los paganos? Por tanto, sean perfectos como su Padre celestial es perfecto". Palabra del Señor.

Reflexión.

El Evangelio de Hoy continúa haciendo hincapié en lo propio de la vida cristiana. Esta es una de las originalidades aportada por Jesús a nuestro mundo. Se nos propone superar la lógica “normal” de la vida y de las relaciones humanas para ser verdaderamente justos como Dios. No es cierto que la justicia sea darle a cada uno lo  que le pertenece, justicia es darle al otro lo mejor, lo que más bien le hace, la justicia es el amor sin límites.

Cuando en nuestro acercamiento a la Biblia nos encontramos con textos como estos, fácilmente nos volvemos escépticos. Amar al enemigo y orar por quien asume este rol frente a nosotros parece una idea desproporcionada. Incluso algunos han pensado que es sólo una exageración. Sin embargo, el amor universal que no supera los lazos de la sangre, del idioma o de la nación sólo es una vaga idea, pero no una manifestación del Reino. El amor a los enemigos es una invitación a experimentar el amor con el que Dios nos ama. Es decir, un amor completamente centrado en el otro y la otra. Creer esto tiene que producir en nosotros una inmensa paz, confianza y esperanza, pues nuestra salvación no depende tanto de lo que nosotros logremos hacer, sino del amor infinito con que Dios nos ama.

Amar al enemigo es, también, ayudarle a encontrar un camino de diálogo y de maduración humana, porque amar al enemigo no es lo mismo que tolerar el abuso y la iniquidad. Una de las maneras más prácticas de amor al enemigo la constituye la oración por los que nos ofenden o están en desacuerdo con nosotros, oración sincera y constante. Otra manera es no hablar mal de aquellos que se han declarado nuestros enemigos y que buscan hacernos fracasar. ¿Y tú, qué opinas?

lunes, 15 de junio de 2015

PERO YO LES DIGO

“El Evangelio de Hoy”: Mt 5, 38-42
Lectura del santo evangelio según san Mateo:


En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos: "Saben que está mandado: "Ojo por ojo, diente por diente". Pues yo les digo: No hagan frente al que les agravia. Al contrario, si uno te abofetea en la mejilla derecha, preséntale la otra; al que quiera ponerte pleito para quitarte la túnica, dale también la capa; a quien te requiera para caminar una milla, acompáñalo dos; a quien te pide, dale; y al que te pide prestado, no lo rehúyas". Palabra del Señor.

Reflexión

Para nosotros los seguidores de Cristo, no se trata de una pasividad estéril que deja todo como está y raya con la injusticia. De lo que se trata es de ir más allá de la mera norma o ley que no trasciende y que puede empeorar los conflictos. Cuando uno de los guardias le pega en una mejilla a Jesús en el proceso que lo condenó a la muerte en la cruz, Jesús no reacciona de manera pasiva sino serena, quiere ayudar al otro a descubrir por sí mismo la injusticia en la que ha caído. Quiere atacar la injusticia buscando el motivo de ésta.

Ya  sabemos que la violencia y los conflictos no se curan con más de lo mismo. No es verdad que sea eficaz a largo plazo, el ojo por ojo y diente por diente… la solución hay que buscarla más en actitudes interiores que hagan pensar y discernir, no en amenazas provocadoras de miedos y temores pues estos pueden hacer reaccionar a los violentos con más y ciega violencia, provocando peores daños y conflictos.

Frente a los conflictos y violencia los cristianos estamos llamados a detenerla antes que alcance niveles caóticos, pero pararla a través de métodos fraternos, haciendo caer en la cuenta de lo absurdo y llamando a la cordura, a lo razonable. No siempre funciona pues los seres humanos somos libres y decidimos mantenernos en caminos violentos. Como le pasó a Jesús que de todas maneras lo mataron, pero ofrece caminos, posibilidades de soluciones dadoras de vida. No olvidemos que las respuestas más prontas Ante agresiones y ofensas nuestras respuestas inmediatas serán como la ley del talión. Pero Jesús nos muestra un camino mejor, el camino fraterno… resistámonos a nuestros instintos y vivamos desde el Evangelio y el seguimiento de Cristo. Esto nos ayudará a disfrutar de una paz más saludable y duradera.

domingo, 14 de junio de 2015

ENVIADOS A SEMBRAR CON HUMILDAD


“El Evangelio de Hoy”: Mc 4,26-34
Lectura del santo evangelio según san Marcos.
En aquel tiempo, dijo Jesús a la gente: "El reino de Dios se parece a un hombre que echa simiente en la tierra. Él duerme de noche y se levanta de mañana; la semilla germina y va creciendo, sin que él sepa cómo. La tierra va produciendo la cosecha ella sola: primero los tallos, luego la espiga, después el grano. Cuando el grano está a punto, se mete la hoz, porque ha llegado la siega."

Dijo también: "¿Con qué podemos comparar el reino de Dios? ¿Qué parábola usaremos? Con un grano de mostaza: al sembrarlo en la tierra es la semilla más pequeña, pero después brota, se hace más alta que las demás hortalizas y echa ramas tan grandes que los pájaros pueden cobijarse y anidar en ellas." Con muchas parábolas parecidas les exponía la palabra acomodándose a su entender. Todo se lo exponía con parábolas, pero a sus discípulos se lo explicaba todo en privado. Palabra del Señor.

Reflexión

A Jesús le preocupaba mucho que sus seguidores terminaran un día desalentados al ver que sus esfuerzos por un mundo más humano y dichoso no obtenían el éxito esperado. Lo más importante es que no olviden nunca cómo han de trabajar. Con ejemplos tomados de la experiencia de los campesinos de Galilea, les anima a trabajar siempre con realismo, con paciencia y con una confianza grande. No es posible abrir caminos al Reino de Dios de cualquier manera. Se tienen que fijar en cómo trabaja él.

Lo primero que han de saber los seguidores de Jesús es que su tarea es sembrar, no cosechar. No vivirán pendientes de los resultados. No les han de preocupar la eficacia ni el éxito inmediato. Su atención se centrará en sembrar bien el Evangelio. Los colaboradores de Jesús han de ser sembradores. Nada más. Olvidar la lógica del cosechador que sale siempre a recoger frutos y entrar en la lógica paciente del que siembra un futuro mejor.

La fuerza del Evangelio no es nunca algo espectacular o clamoroso. Según Jesús, es como sembrar algo tan pequeño e insignificante como “un grano de mostaza” que germina secretamente en el corazón de las personas. Por eso, el Evangelio solo se puede sembrar con fe. Es lo que Jesús quiere hacerles ver con sus pequeñas parábolas. El Proyecto de Dios de hacer un mundo más humano lleva dentro una fuerza salvadora y transformadora que ya no depende del sembrador. Cuando la Buena Noticia de ese Dios penetra en una persona o en un grupo humano, allí comienza a crecer algo que a nosotros nos desborda.

Lo que necesitamos es buscar caminos nuevos con la humildad y la confianza de Jesús. Tarde o temprano, los cristianos sentiremos la necesidad de volver a lo esencial. Descubriremos que solo la fuerza de Jesús puede regenerar la fe en la sociedad descristianizada de nuestros días. Entonces aprenderemos a sembrar con humildad el Evangelio como inicio de una fe renovada, no transmitida por nuestros esfuerzos pastorales, sino engendrada por él. Buen resto del domingo.

jueves, 4 de junio de 2015

El MANDAMIENTO PRINCIPAL

“El Evangelio de Hoy”: Mc 12, 28b-34

Lectura del Santo Evangelio según san Marcos.

En aquel tiempo, un escriba se acercó a Jesús y le preguntó: "¿Qué mandamiento es el primero de todos?" Respondió Jesús: "El primero es: "Escucha, Israel, el Señor, nuestro Dios, es el único Señor: amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente, con todo tu ser." El segundo es éste: "Amarás a tu prójimo como a ti mismo." No hay mandamiento mayor que éstos."
El escriba replicó: "Muy bien, Maestro, tienes razón cuando dices que el Señor es uno solo y no hay otro fuera de él; y que amarlo con todo el corazón, con todo el entendimiento y con todo el ser, y amar al prójimo como a uno mismo vale más que todos los holocaustos y sacrificios." Jesús, viendo que había respondido sensatamente, le dijo: "No estás lejos del reino de Dios." Y nadie se atrevió a hacerle más preguntas. Palabra del Señor

REFLEXIÓN

En nuestro país, la República Dominicana, hoy celebramos la fiesta del Cuerpo y la Sangre de Cristo. Este evangelio no es el que corresponde a esta fiesta sino el de la feria de hoy. El mandamiento del amor, a Dios y al prójimo nos ayuda a centrarnos en lo esencial de nuestra fe. Amar a Dios significa poner la confianza puesta en Jesús y su anuncio. Esto supone mostrar este  amor amando al prójimo como a nosotros mismos. Jesús nos muestra El camino a seguir. Él nos ha amado hasta entregar su vida por amor. Jesús no ofrece sacrificios de animales, se ofrece él mismo, amando a los más necesitados, curando a los enfermos, perdonando a los pecadores públicos y brindando acogida y ternura a cuantos se acercaban a él. En este “Jueves Corpus”, dejémonos que Jesús sea nuestro alimento. Frente a todos los problemas que se presentan, confiemos en Jesús y pidámosle que no nos deje desnutrir en la fe. Que su Espíritu Santo nos anime y sostenga nuestras luchas y aspiraciones.

miércoles, 3 de junio de 2015

ESTÁN MUY EQUIVOCADOS

“El Evangelio de Hoy”: Mc 12, 18-27

Lectura del santo Evangelio según san Marcos.

En aquel tiempo, se acercaron a Jesús unos saduceos, de los que dicen que no hay resurrección, y le preguntaron: "Maestro, Moisés nos dejó escrito: "Si a uno se le muere su hermano, dejando mujer, pero no hijos, cásese con la viuda y dé descendencia a su hermano." Pues bien, había siete hermanos: el primero se casó y murió sin hijos; el segundo se casó con la viuda y murió también sin hijos; lo mismo el tercero; y ninguno de los siete dejó hijos. Por último murió la mujer. Cuando llegue la resurrección y vuelvan a la vida, ¿de cuál de ellos será mujer? Porque los siete han estado casados con ella."
Jesús les respondió: "Estáis equivocados, porque no entendéis la Escritura ni el poder de Dios. Cuando resuciten, ni los hombres ni las mujeres se casarán; serán como ángeles del cielo. Y a propósito de que los muertos resucitan, ¿no habéis leído en el libro de Moisés, en el episodio de la zarza, lo que le dijo Dios: "Yo soy el Dios de Abrahán, el Dios de Isaac, el Dios de Jacob"? No es Dios de muertos, sino de vivos. Estáis muy equivocados." Palabra del Señor

REFLEXIÓN


Los saduceos quieren ridiculizar a Jesús y su enseñanza sobre la Resurrección de los muertos. Buscan desacreditarlo para condenarlo. El objetivo es hacer caer a Jesús en la trampa. La respuesta de Jesús es que la mujer del caso no pertenece a nadie. Porque con la resurrección de los muertos las condiciones de la vida anterior cambian sustancialmente. La resurrección abre la puerta a una dimensión diferente de la nuestra. Por la resurrección se entra a participar de la vida de Dios en una comunión que supera toda relación humana. Jesús argumenta sobre la resurrección apelando a la identidad misma de Dios: él no es un dios muerto o de muertos, sino vivo y de vivos, de Abrahán, Isaac y Jacob; es el Dios de la vida. Cuando pretendemos acudir a tradiciones religiosas y llegamos hasta a ocultar el verdadero rostro de Dios, estamos desconociendo su misma identidad. Confesar al Dios vivo, Señor de la vida, es comprometerse a cuidar y defender la vida en todas sus formas como don suyo. Porque él es el origen y destino de la vida. En él encontrará toda vida su más plena realización. Vivamos de acuerdo con lo que creemos, defendiendo la vida de los necesitados.

lunes, 1 de junio de 2015

DEJÁNDOLO ALLÍ SE MARCHARON

“El Evangelio de Hoy”: Mc 12,1-12

Lectura del Santo Evangelio según san Marcos.

En aquel tiempo, Jesús se puso a hablar en parábolas a los sumos sacerdotes, a los escribas y a los ancianos: "Un hombre plantó una viña, la rodeó con una cerca, cavó un lagar, construyó la casa del guarda, la arrendó a unos labradores y se marchó de viaje. A su tiempo, envió un criado a los labradores, para percibir su tanto del fruto de la viña. Ellos lo agarraron, lo apalearon y lo despidieron con las manos vacías. Les envió otro criado; a éste lo insultaron y lo descalabraron. Envió a otro y lo mataron; y a otros muchos los apalearon o los mataron. Le quedaba uno, su hijo querido. Y lo envió el último, pensando que a su hijo lo respetarían. Pero los labradores se dijeron: "Éste es el heredero. Venga, lo matamos, y será nuestra la herencia." Y, agarrándolo, lo mataron y lo arrojaron fuera de la viña. ¿Qué hará el dueño de la viña? Acabará con los ladrones y arrendará la viña a otros. ¿No han leído aquel texto: "La piedra que desecharon los arquitectos es ahora la piedra angular. Es el Señor quien lo ha hecho, ha sido un milagro patente?"
Intentaron echarle mano, porque veían que la parábola iba por ellos; pero temieron a la gente, y, dejándolo allí, se marcharon. Palabra del Señor.

Reflexión


El Evangelio de hoy nos presenta esta parábola resumen de la historia de Israel tomada del profeta Isaías 5,1-7, es también la forma como responde Jesús a quienes cuestionan su autoridad. ¿Quién es el dueño de la viña? ¿Quiénes los agricultores? ¿Quiénes son los empleados y el patrón? ¿Quién es el heredero? ¿Cuál es el mensaje? Con la parábola Jesús revela el origen de su autoridad, él es el hijo, el heredero. Denuncia además el abuso de autoridad de los viñadores, es decir, de los sacerdotes, los escribas y los ancianos que no cuidan adecuadamente al pueblo de Dios. Defiende la autoridad de los mensajeros o profetas enviados por Dios, pero rechazados y asesinados por los hombres y las estructuras de poder. Denuncia también a las autoridades que matan al hijo porque no quieren perder la cuota de poder que han acumulado a lo largo de los años a costa del sufrimiento y la pobreza de sus compatriotas. En vez de convertirse, las autoridades de Israel prefirieron matar a Jesús en la cruz. ¿Qué queda de esta parábola y su mensaje en nuestras comunidades cristianas? ¿Estamos oyendo y siguiendo a Jesús o seguimos prefiriendo quitarlo de en medio y organizándonos y actuando en contra de su enseñanza?  Es muy fácil excusarnos frente al Evangelio y crear y seguir tradiciones nuestras completamente contrarias a Jesús.